Las refinerías chinas han comprado aproximadamente una cuarta parte de los suministros del petróleo ruso de los Urales que se planean extraer durante este mes de junio, pese al precio relativamente alto en el contexto de los últimos días. En general, la demanda que se va restableciendo poco a poco junto con los efectos del recorte de producción acordado por el grupo OPEP+ están empujando los precios del crudo al alza.
No solamente las refinerías en China, sino también las de otros países asiáticos se han visto obligadas últimamente a buscar solución a la falta de petróleo en el mercado causada, entre otros factores, por la decisión de Arabia Saudita de reducir los suministros del crudo. El oro negro proveniente de Rusia se ofrecía como una alternativa más viable en el momento.
Según la agencia Reuters, a finales de mayo los tanqueros en los puertos de Primorsk y Ust-Luga cargaron 1,1 millones de toneladas de crudo de los Urales con destino a China. Durante el mes de junio, los suministros de petróleo ruso a China alvanzarán en total 4,4 millones de toneladas y más tarde continuarán con entregas de 2,2 millones de toneladas mensuales. China aprovecha así el momento cuando el petróleo de los Urales cotiza actualmente a un precio levemente menor que el crudo tipo Brent del Mar del Norte.
A su vez, Rusia está negociando actualmente con la OPEP la posible prolongación en un mes más del recorte de producción por un volumen de casi 10 millones de barriles diarios. El respectivo acuerdo cerrado hace dos meses vencerá a finales junio y la OPEP junto con Rusia intentan de llegar a un nuevo compromiso que está, según sostiene Reuters, muy cerca.