La riqueza de la población mundial ha disminuido por primera vez desde la crisis financiera de 2008. La culpa la tiene la caída de los tipos de cambio tras el estallido de la guerra rusa en Ucrania. Debilitó las acciones y los beneficios de los fondos de inversión, provocando una caída del 3,5% de la riqueza mundial, hasta 255 billones de dólares (5,5 billones de coronas checas). Así se desprende de un estudio publicado hoy por la consultora Boston Consulting Group (BCG), informa DPA.
«El mundo occidental, en particular, experimentó un fuerte descenso de los activos financieros en 2022», afirmó Michael Kahlich, analista de BCG. Pero los activos reales, como los inmuebles, los metales preciosos y las joyas, siguieron creciendo el año pasado, con un 5,5% más, según el estudio.
El grupo de superricos con activos financieros superiores a 100 millones de dólares se redujo el año pasado en unos 4.000 miembros, hasta algo menos de 62.000 en todo el mundo, debido a la caída de los mercados de capitales.
Los países más ricos del mundo
Estados Unidos encabeza la clasificación de patrimonio neto con 144 billones de dólares, seguido de China (76 billones) y Japón (24 billones). BCG estima que es probable que el patrimonio neto mundial aumente un cinco por ciento anual hasta casi 600 billones de dólares en 2027.
Los estudios publicados recientemente confirman la tendencia del año pasado, aunque las cifras no son idénticas debido a diferencias en la metodología. Los datos de la consultora Capgemini también confirman que muchos ricos sentirán la caída de los mercados bursátiles en 2022. El número de personas con activos invertibles de al menos un millón de dólares estadounidenses también ha disminuido en todo el mundo, según la empresa.
Fuente: ČTK