
El dólar estadounidense registró la semana pasada fuertes altibajos parecidos a una montaña rusa. Al inicio, sufrió una caída frente al yen japonés expuesto a una creciente presión en relación con las preocupaciones que despierta la tensión en las relaciones comerciales entre los Estados Unidos y China.
Más tarde, el dólar volvió a crecer frente al yen, alcanzando su máximo semanal tras la noticia sobre las esperanzas de China en iniciar las negociaciones sobre un tratado commercial parcial.
Las presiones sobre el dólar se originaron debido a las restricciones en cuanto a la concesión de visas a funcionarios del gobierno chino y del Partido Comunista aplicadas por el Departamento de Estado por causa de detenciones y abusos de las minorías musulmanas en la provincia china de Sinkiang. El dólar bajó primero a 107,09 USD/JPY (caída en 0,18 %), volviéndose a recuperar más tarde en un 0,43 %, tras las declaraciones del viceprimer ministro chino Liu sobre las futuras negociaciones comerciales con funcionarios estadounidenses, para alcanzar finalmente 107,53 USD/JPY. Según el diario Financial Times, China ofrece además un aumento en las compras anuales de productos agrícolas procedentes de Estados Unidos para facilitar una solución razonable de la situación.
El dólar estadounidense fortaleció también en un 0,3 % frente al franco suizo y el índice dólar USDX que mide el valor del dólar estadounidense con relación a la canasta de seis monedas extranjeras aumentó en un 0,15 %.