Según Mark Zandi, economista en jefe de la consultora Moody´s, es evidente que la pandemia de la enfermedad por coronavirus causó daños fundamentales y a largo plazo en el mercado laboral de Estados Unidos. „Muchos puestos de trabajo ya no volverán. La idea de que la economía va a recuperar pronto el nivel de antes de la pandemia no es realista ysimplemente no se va a cumplir,“ aseveró Zandi.
Los informes sobre la situación en el mercado laboral en el mes de junio muestran que la cantidad neto de puestos de trabajo aumentó en 4,8 millones, pero dicho incremento se debe en gran medida a que una cantidad considerable de personas se enccontraban en cesantía temporal, ante todo en los sectores de comercio, hotelería y gastronomía que se van reactivando paulatinamente.
Al mismo tiempo, dunante junio perdieron empleo en forma definitiva 759 mil personas que es el nivel más alto desde enero de 2009 cuando este indicador superó 800 mil. Según los analistas, hoy en día hay en Estados Unidos aproximadamente 3,7 millones de desempleados cuyos puestos de trabajo desaparecieron en forma permanente y con toda seguridad no se van recuperar a largo plazo. Otros millones de empleados se ven amenazados seriamente por la pérdida definitiva de su puesto laboral. La situación puede empeorar aún más, ya que el reciente incremento de nuevos casos de contagio por el coronavirus ha llevado a las autoridades a iniciar la segunda ola de medidas restrictivas que seguirán impactando fuertemente la economía de Estados Unidos.
